Actualidad
Preservar los ecosistemas marinos
26/05/2021
Conservar y utilizar sosteniblemente los océanos, los mares y los recursos marinos es uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030. Y es que los océanos son una de las principales reservas de biodiversidad en el mundo. Constituyen más del 90% del espacio habitable del planeta y contienen unas 250.000 especies conocidas. Además, suministran la mitad del oxígeno que respiramos y absorben anualmente un 26% de las emisiones antropógenas de dióxido de carbono emitidas a la atmósfera. Es por ello fundamental preservarlos y plantear, por ejemplo, medidas eficaces en el diseño de instalaciones portuarias que eviten que aguas contaminadas sean vertidas al mar.
Situaciones accidentales como roturas o maniobras incorrectas en la reposición de combustible de los barcos, la limpieza de las embarcaciones o incluso la manipulación de equipo de control del vaciado de tanques que almacenan hidrocarburos u otras sustancias oleosas, pueden provocar que estos líquidos contaminantes caigan al agua y dañen de forma irreversible el ecosistema marino. Una de las formas más óptimas de evitar este tipo de situaciones es la correcta canalización de aguas pluviales y residuales, y la incorporación de separadores de hidrocarburos en las instalaciones portuarias. De esta forma, los residuos o fangos podrán ser almacenados para su posterior eliminación y el agua tratada y exenta de hidrocarburos o sustancias oleosas, podrá ser descargada al mar sin riesgos.
Recogida y tratamiento de aguas
ACO plantea un sistema que permite tanto la recogida de aguas como su tratamiento; esto es, combinar canales de drenaje lineales continuos y tanques que son en realidad separadores de hidrocarburos y estaciones de decantación. Los primeros permiten captar las aguas pluviales o residuales para su posterior tratamiento. ACO dispone de canales con una resistencia al peso de todo tipo de vehículos (clase de carga D400) y con fácil mantenimiento, pues su limpieza se puede realizar por medio de mangueras de agua a presión. En cuanto a los equipos para el tratamiento de aguas residuales, se pueden fabricar en polietileno de alta densidad o en hormigón armado para su instalación enterrada. Cuentan con diferentes tamaños según la capacidad de almacenamiento de aceites o hidrocarburos que requieran los puertos. Las áreas donde deberían disponerse estos sistemas, son principalmente las zonas previstas para la reparación y mantenimiento de embarcaciones (varadero), en las zonas destinadas al repostaje de combustible, o en las zonas de almacenamiento temporal de residuos peligrosos procedentes de buques.
Marco regulador
La prevención, reducción y control de la contaminación se regula principalmente mediante dos convenios internacionales que rigen, entre otras cosas, la descarga de vertidos ilícitos de hidrocarburos, residuos de petróleo y otras sustancias nocivas al mar. Son el la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (UNCLOS) y el Convenio Internacional para prevenir la contaminación por los buques (MARPOL73/78). De forma complementaria, siempre es útil contar con Sistemas de Gestión Ambiental que implican poner en marcha un proceso cíclico de planificación, implantación, revisión y mejora de los procedimientos y acciones para garantizar el cumplimento de objetivos ambientales de las instalaciones.
Foto: Francesco Ungaro on Unsplash