Campus Iberdrola, San Agustín de Guadalix, Madrid
02/04/2019Una “ciudad en la ciudad” sostenible, armónica, flexible y pensada para la convivencia y la formación es la descripción que el estudio Alonso, Balaguer y Arquitectos Asociados hace del nuevo Campus Iberdrola. El complejo, situado en San Agustín de Guadalix (Madrid), apuesta por tener un carácter público y abierto como premisas compositivas fundamentales. El conjunto de edificios se adapta a la topografía existente, minimizando los posibles movimientos de tierras y las excavaciones, y se organiza alrededor de un gran espacio exterior (la plaza), para ser cubierto por una gran marquesina ondulante que le protege y le ampara de la intemperie, a la vez que transmite una idea de integridad formal y conceptual.
La arquitectura del Campus Iberdrola se concibe como un puzzle o mecano, donde todas las piezas de comunicación, servicios e instalaciones son versátiles y ubicables, a voluntad. De este modo, en los edificios se opta por externalizar todos los núcleos de comunicaciones, ya sean tránsito de personas, instalaciones o núcleos húmedos. Esto permite la flexibilidad de futuros cambios de uso y una gran simplicidad de distribución en el interior de los mismos, así como una sostenibilidad basada en minimizar y adaptar las superficies de fachadas en función de sus orientaciones –constante térmica dentro de los edificios –, favoreciendo la correcta ventilación natural cruzada. Es más, la simplicidad de la ordenación, conjuntamente con accesos separados en doble nivel –viario y peatonal – facilita y posibilita la categorización de accesos en función del grado de seguridad.
Aulas y talleres de formación industrial, área de hospedaje para los visitantes, servicio de restauración, oficinas, centro de deportes y un sinfín de actividades conviven en una franca armonía, tanto en esta primera fase, ya finalizada, como en una segunda fase en construcción. Un auditorio completa el amplio listado del programa de usos, con múltiples posibilidades de iluminación natural, mediante grandes paneles móviles de fachada. Finalmente, los estacionamientos, con una superficie de 12.000m2, resultan totalmente abiertos, pero cubiertos, con la consiguiente eficiencia energética y la agradable sensación de iluminación y ventilación natural.
Evacuar y separar las aguas pluviales de las residuales
Todas las zonas exteriores y perimetrales del edificio, así como la zona de aparcamiento, disponen de sistemas para evacuar y extraer las aguas pluviales de forma eficiente. Para ello se han dispuesto 900 metros lineales de canal de drenaje ACO Multiline con reja de fundición. Un sistema fabricado en hormigón polímero que logra captar hasta 9 l/s de agua, de modo que su eficacia permite la rápida evacuación sin que se formen zonas encharcadas que dificulten la circulación de vehículos. Las aguas almacenadas procedentes de precipitaciones se almacenan y se reutilizan para el riego. De forma independiente, se han instalado separadores de hidrocarburos Oleopator y separadores de grasas Lipumax de ACO que permiten la extracción y el almacenamiento de aguas residuales, aceites y otros líquidos con la finalidad de que no se mezclen con las pluviales y que acaben siendo contaminadas y no aprovechables. Estas instalaciones quedan enterradas y colocadas de forma discreta en el aparcamiento para permitir una fácil operativa de mantenimiento y vaciado.
Esta política de diferenciación en la evacuación y tratamientos de las aguas pluviales y residuales responde también a una de las premisas propuestas por la empresa para generar un complejo sostenible y respetuoso con el entorno medio ambiental y el paisaje que le envuelve.