Los separadores de grasas son elementos esenciales para el tratamiento de aguas residuales que puedan contener aceites y grasas, tanto de origen animal como vegetal. Su instalación es necesaria en industrias alimentarias, así como en cocinas profesionales de restaurantes y hoteles para evitar que los desechos alimentarios dañen los sistemas de drenaje de los edificios y acaben taponando y contaminando las redes de saneamiento municipales.

En el exterior de la fábrica Donuts Iberia de Santa Perpètua de Mogoda (Barcelona), concretamente en el conducto de salida de las aguas residuales, se instaló bajo una losa de reparto para camiones un separador de grasas con desarenador SGD 25 de ACO Remosa, cuyo volumen es de 15 m3. Gracias a la diferencia de densidades generada en el interior del depósito entre las grasas y el agua, el influente se recoge en la parte intermedia del equipo, evitando así la salida de las grasas.  

La elección de este equipo para la realización de las tareas de separación de grasas corresponde a la presencia de una capa de resina viniléster en su interior. Esta resina actúa como una barrera química que es capaz de resistir y tratar las altas temperaturas de las aguas residuales que llegan al interior del separador, pudiendo alcanzar valores puntuales de hasta 80 ºC.